¡Que viva la perra!
¡Que viva! Repito.
Si se hunde la tierra
Me alegro infinito,

¡España, que el gorro 5
vencernos espera!
¡España, socorro,
que viene Cabrera!
Con faz de verdugo
la piden por eso 10
los tontos el yugo,
los locos progreso.
La incitan, la soban
la arrancan el grito,
y todos la roban... 15
Me alegro infinito.

Mas quiero mil muertes
que vida en cuaresma:
y en sátiras fuertes
gastara una resma. 20
Mas pronto importunos
se irán derrotados
silicios, ayunos,
sermón y pescados.
Vendrán los jamones, 25
el buen cochifrito,
y habrá pastelones,
Me alegro infinito.

El pobre don Paco,
muy gran caballero, 30
que andaba tan flaco
cuando era soltero;
buscó con porfías
mujer cariñosa
ya todos los días 35
me dice su esposa:
«Está muy redondo,
parece un cabrito»
y yo la respondo:
Me alegro infinito. 40

Un hijo esperando
de su Guadalupe,
va Juan acechando
si bebe o escupe.
La pobre disputa, 45
que bien lo desea,
y está tan enjuta,
que él bufa y patea;
Mas viénele luego
con un antojito, 50
y exclama el borrego
Me alegro infinito.

Un mozo que bodas
con prisa anhelaba,
por feas a todas 55
cruel desechaba.
Ya ciegas, ya sordas,
en todas vio macas;
en unas por gordas,
en otras por flacas. 60
Halló una mozuela
de rostro bonito,
la entró la viruela,
Me alegro infinito.

Yo sé que pateta 65
le lleva y se enoja;
la suegra le aprieta,
Y el pobre la aflojo.
¡Infames errores!
¡Cruel socaliña! 70
Porque él con amores
sacola una niña,
con torpes antojos
la suegra al bendito
le saca los ojos; 75
Me alegro infinito.

De Plácido salen
a luz los excesos,
que al médico valen
visitas y pesos. 80
Él va procurando
que no se componga;
y así en escuchando
que el mal se prolonga,
Que el pulso le falta 85
que está muy malito,
el médico salta:
Me alegro infinito.

Son Blas y la Blasa
Tan dados a fiesta, 90
que siempre su casa
Parece una orquesta,
Y aun he averiguado
que tocan en corro:
la gaita el criado, 95
la moza el piporro,
El bombo la madre,
las hijas el pito,
y el cuerno su padre;
Me alegro infinito. 100